El psicólogo y especialista en temas de pareja Dr. John Gottman ha dedicado más de tres décadas de su vida a investigar matrimonios y divorcios. Su método de trabajar con parejas voluntarias en diversas etapas de sus relaciones le ha permitido reunir multitud de datos y pruebas científicas, y gracias a su trabajo es capaz de predecir si un matrimonio acabará en divorcio con una asombrosa precisión del 91%.
De entre las seis principales señales que pueden predecir un divorcio destaca la de «los cuatro jinetes del apocalipsis», que aparecen habitualmente, aunque no siempre, en el siguiente orden: crítica, desdén, actitud defensiva y actitud evasiva.
La crítica. Es la más común en pareja, y todos los matrimonios estamos expuestos a este defecto. Aquí la clave es el lenguaje que utilizamos cuando discutimos. Es preferible que lo que comuniquemos sean más bien nuestras quejas o sentimientos, empezando por el «yo» antes de echar la culpa al otro. Por ejemplo: «me sentí sola ayer por la noche esperándote tanto tiempo con la cena», en lugar de «¡nunca llegas al tiempo para la cena, siempre tengo que esperarte!».
Desprecio. Es el peor de los cuatro jinetes. Sarcasmo, esceptisismo, burla o humor hostil son algunas formas de desprecio. El antídoto es la admiración, el cariño. Si cultivamos nuestra actitud cariñosa y nos acordamos de las cualidades y sentimientos positivos es muy difícil que empeore la relación. Aunque parece muy obvio, es importante recordarnos que estas cualidades son esenciales para cualquier matrimonio. Cuantos más pensamientos cariñosos y de admiración existan, menos posible será que en una discusión surjan actitudes desdeñosas.
Actitud defensiva. Es habitual que cuando una pareja discute, uno se esté defendiendo. Pero no es una manera eficaz para discutir. En realidad lo que acabará sucediendo será culpar al otro y esto agravará la situación. Con la actitud defensiva interpretamos el papel de víctimas y lo que estamos diciendo realmente es «no es mi culpa, es la tuya«.
Actitud evasiva. Cuando la pareja lleva tiempo discutiendo de manera violenta llega el último jinete, la evasión. Con esta actitud uno transmite la ausencia, pasividad y separación respecto a la conexión matrimonial.
Una de las conclusiones que ha sacado este especialista es que las parejas felizmente casadas son matrimonios emocionalmente inteligentes. En otras palabras, parejas que saben manejar sus sentimientos negativos y adquieren hábitos y dinámicas positivos. En su libro propone siete principios para generar hábitos y comportamientos para conseguirlo. Os animamos a profundizar en algunos de ellos:
- El termómetro de la amistad en pareja
- Práctica una conversación calmante
- ¿Sabes cuales son los problemas solubles?
- Vivir feliz con problemas insolubles
- ¿Tienes presente lo transcendental?
2 comentarios
Muy buen blog
¡Muchas gracias Lissette! Bienvenida y no dejes de escuchar nuestro podcast también 😊