Hace ya un tiempo nos despedíamos para siempre de la abuela de mi marido. ¡Parece mentira que solo unas semanas antes estuviera tan llena de energía y vida a pesar de sus 91 años! Pero la vida se acaba para todos, incluso para quienes nos parecen inagotables, como era ella… Asistimos a un funeral muy emotivo y bonito acompañados de multitud de familiares y amigos. Apenas hablábamos. Todos buscábamos y repetíamos los mismos gestos: abrazos fuertes y besos sentidos, gestos que expresan todo a la vez… «Estoy contigo en el duelo, también estoy triste y quiero transmitirte mi cariño». Lo necesitábamos. El toque físico es imprescindible cuando se acaban las palabras.
Desde pequeña me encantaba la cercanía de mi familia y amigos. Me transmitían confianza y bienestar. También en mi matrimonio tengo la suerte de que para los dos es un lenguaje muy importante. Alegría, entusiasmo, cariño, cercanía, felicidad… en fin, para mi no existe mejor manera de decirlo todo a la vez.
Está científicamente comprobado que un suave abrazo o una caricia estimulan el sistema nervioso enviando mensajes relajantes al cerebro. Puede que a uno de vosotros os importe menos o incluso no constituya parte del lenguaje de amor, pero aún así es obvio que en la relación matrimonial es un lenguaje imprescindible. No podemos permitirnos darlo por sentado. Es demasiado poderoso.
«Quiero que recordéis qué sentíais al tocaros»
En la película «Si de verdad quieres» que ya hemos recomendado en este blog, el terapeuta de Kay y Arnold les ayuda a recuperar su conexión perdida. El primer ejercicio que les propone es precisamente el toque físico. Los protagonistas se ven descubriendo de nuevo el placer de la cercanía física. Es el primer paso para reconectar y recordarles que existía la intimidad y la pasión antes de su crisis.
Por muy obvio que parezca el tema, creo que os beneficiaría reflexionar sobre ello. A lo mejor es algo que ambos asumís de antemano. Atreveros a hablarlo y observad cómo respondéis. Quizá descubráis en el otro que tiene más necesidad de caricias, besos y abrazos de la que ambos suponíais.
El contacto físico sin duda alguna se puede calificar como una herramienta de comunicación tremendamente efectiva. Si está presente os ayudará a crear mayor intimidad y unidad. Además, para muchos, constituye el primer paso para conseguir intimidad y pasión, para tener una relación más profunda.. Y es determinante para tener relaciones sexuales más satisfactorias y plenas.
Si quieres saber más, en nuestro podcast tenemos un episodio dedicado al toque físico.